No se puede resumir la vida, siquiera la vida musical de uno, en solo cinco o diez canciones. Todos tenemos un pequeño rincón en nuestra cabeza en el que un centenar de piezas musicales, quizás incluso más, nos remiten a épocas felices y épocas desgraciadas de nuestra existencia. Canciones que nos marcaron y que aún hoy en día poseen una enorme carga emotiva que hace que no podamos escucharlas sin revivir aquellas experiencias. Pero hoy el post no va de eso.