ABSOLUTE BEGINNERS, de Colin McInnes
No mucho antes de que surgieran los Angry Young Men (Osborne, Sillitoe, Amis…) pero lo suficiente como para pasar injustamente de puntillas por la historia de la literatura británica, Colin McInnes escribía su Trilogía de Londres, que constaba de las novelas City of Spades, Absolute Beginners y Mr. Love and Justice (las dos primeras traducidas en España como Ciudad de ébano y Principiantes). Dado que las tres novelas son independientes y solo tienen en común un lugar y una época, podemos ocuparnos directamente de la segunda de la lista, que al cabo es la que ha tenido más resonancia a escala mundial.
Antes de seguir, una advertencia: si has visto la “adaptación cinematográfica” de Julien Temple, créeme, no tiene absolutamente nada que ver con la novela. En realidad, la película de Temple no es más que un fuego de artificio, un artefacto vacío pero muy brillante y luminoso en la forma, una masturbación pública, un señor que nos quiere enseñar lo bien que domina el lenguaje cinematográfico (y lo logra). Pero, definitivamente, se nota que la historia original le molesta.
Absolute Beginners, la novela, es interesantísima por muchas razones. En primer lugar, porque cuenta los momentos iniciales de lo que posteriormente sería el movimiento mod: locura por el jazz, estilo italiano y una apertura de horizontes (morales, políticos, raciales) nunca vista antes en Reino Unido. Los primeros mods eran tales porque amaban el modern jazz, en oposición a los trads (amantes del swing y el dixie, formas tradicionales y muy poco experimentales). Pero también lo eran porque constituían la primera generación que se pasaba por el forro el racismo paterno e institucional, sempiterna mancha en el país.
La segunda razón por la que Absolute Beginners es tan recomendable es por la multitud de innovaciones formales que adopta McInnes: en primer lugar, el soliloquio interior del protagonista y narrador nunca nombra a nadie por su nombre, sino por ácidos, casi malvados apodos que tan solo remiten en el amor incondicional a su padre y la difícil relación con el resto de su disfuncional familia.
El mismo nivel de acidez, o incluso mayor, lo aplica a instituciones sacrosantas como la policía, los jueces, la banca y, en general, la Inglaterra blanca y conservadora contra la que se levantaba en armas una juventud harta de batallitas y de “generaciones más grandes”. Una juventud que, además, por primera vez tenía dinero en el bolsillo y se sentía empoderada, en primer lugar, y tremendamente distanciada de todas las anteriores.
Si quieres conocer el auténtico carácter revolucionario del movimiento mod; el por qué ha sido históricamente progresista y antirracista; o si sencillamente quieres disfrutar de una novela ágil, diferente, cáustica y muy cabrona, hazme caso y píllate Absolute Beginners / Principiantes. Anagrama la publicó en español en 1986, aprovechando el lanzamiento de la película, y se puede encontrar en Iberlibro por poco dinero. Aprovecha.
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