Se acerca ya el verano. La temporada “buena” de surf ha llegado a su fin. Sin ir más lejos, la mejor olita que he pillado hoy apenas me llegaba a la cintura. Pero, por suerte y por desgracia a la vez, incluso en verano habrá días con olitas, y con ellos llegará el debate de siempre. Que si los socorristas no nos dejan, que si los bañistas se quejan, que si nos invaden. Porque ese es el sentimiento de los surfistas mediterráneos en verano: que nos invaden. Invaden nuestro campo de juego.
Analicemos un poco esta sensación, porque creo que se puede sacar bastante de ella.